Todos sabemos que hay negocios que luchan cada día por sobrevivir, hay quien por desgracia no lo ha conseguido y ha debido de cerrar incluso un negocio de toda la vida, y hay quien como digo debe hacer hasta malabares con tal de ver su negocio arriba. Cualquier tipo de paso en falso puede llevarlo todo al garete, por eso es crucial saber jugar bien las cartas para no perder la partida y verse en la más absoluta ruina. Cualquier tipo de táctica es bienvenida, nunca sabemos cómo van actuar nuestros contrincantes, la competencia es dura de pelar y saber hacia dónde dirigirnos es muy importante, cuando se abre un negocio debe abrirse con la seguridad de que vamos a ser los mejores, pensar en la buena calidad de nuestros productos ayuda mucho y hace que no decaigamos, además de una nueva forma de marketing que nos puede mantener a flote casi sin pensarlo.
La forma en la que coloquemos nuestra tienda es importante, puede que hay quien no le de mucha importancia, pero la tiene y mucho, la distribución y la forma en la que vayan colocados los productos puede llamar la atención de una buena clientela o por el contrario echarla y que no vuelva jamás. Los productos que son menos famosos son los que deben ser más vistos, debemos pensar que quien quiera un bote de nívea nos lo va a pedir sin más, ahora si tenemos una crema igual solo que es de marca blanca y nos interesa venderla evidentemente no podemos ponerla detrás del bote de nívea, ya que de esa forma no los venderemos ni a la de tres. Contar con expositores de metacrilato se convierte en una de las mejores ideas que vamos a tener, ya que no ocupan mucho espacio, son muy ligeros y fáciles de mover y podremos llenarlos con los productos que queramos, lo bueno de estos expositores es que podemos conseguirlos de todas las forma y tamaños, desde grandes a pequeños incluso expositor sobremesa en los que poner folletos de publicidad nos vendrán muy bien.
No es necesario en los negocios buscarle los tres pies al gato ya que tan solo es cuestión de tener algo de sentido común, con un poco de idea y buenos consejos seremos capaces de llevar un negocio viento en popa a toda vela como decía nuestro amigo Espronceda.